Los 3 errores típicos al comprar ropa maternal [+ BONUS]
Si estás aquí es porque probablemente estés embarazada o ya hayas tenido a tu guagua. Sea cual sea el motivo, te vas a pillar en la tarea de ampliar tu closet con ropa maternal o de lactancia, y aquí estamos para contarte los 3 errores clásicos en los que caemos cuando compramos ropa maternal. Bueno y obviamente vamos a contarte como evitarlos, porque tu ya sabes que Nala siempre te acompaña 😏.
Error Nº1: Comprar demasiado pronto
Te enteras de que vas a ser mamá y tu cerebro no deja de andar a toda máquina pensando en toooodo lo que se te viene. Una de las cosas que se instala en tu mente es el tema ropa: ¿qué me voy a poner ahora?, ¿me seguirá entrando mi ropa? ¿qué voy a hacer con ese par de jeans nuevos que me compré?
Y con justa razón. El problema está en ese minuto que el ansia se apodera de ti y lo único que quieres es tener todo ya listo para cuando tus jeans regalones no te cierren más. Pero no es lo que recomendamos.
Lo quieras o no, tu cuerpo experimentará un montón de cambios y lamentablemente no hay bola de cristal que te muestre como se irán comportando. Tal vez lo que te queda perfecto el primer trimestre, no se ajuste a tu cuerpo del tercer trimestre.
Entonces, el consejo es que compres en función de lo que vas necesitando en cada etapa. Nuestra experiencia nos ha enseñado que la primera compra suele ser un par de jeans maternales (o varios pares). Esto ocurre durante el primer trimestre, cuando empieza a salirte guatita y los pantalones dejan de cruzar o de sentirse cómodos.
Durante el segundo trimestre comienzas a necesitar el resto de las prendas, alguna polera maternal, un vestido, polerones, etc. Completas tu closet con pendas maternales que te sirvan para tu día a día, según los cambios que ha experimentado tu cuerpo.
Finalmente, durante el tercer trimestre ya la compra está enfocada en la maleta para la clínica (pijamas o camisas de dormir) y la etapa de lactancia, prendas que te permitan dar papa de una forma cómoda y discreta.
Error Nº2: Ignorar la durabilidad
Si bien el embarazo dura solamente 9 meses, un período de tiempo relativamente corto, son 9 meses de usar un mismo set "limitado" de prendas.
¿A qué me refiero? Probablemente no vas a igualar la cantidad de ropa que tienes en tu closet pre-embarazo, con la que tendrás en tu closet maternal. Esto implica que la rotación de prendas a la que estás acostumbrada, no va a ser la misma. Quizás uses más veces durante la semana un mismo par de jeans o una polera maternal. Y está perfecto. Ese no es un problema.
El problema aparece en el minuto que compramos cosas de mala calidad, quizás porque cuesta más barato o pensando en que son solo 9 meses de uso.
Lo que te recomendamos es que busques ropa maternal bien confeccionada, de materiales duraderos y costuras resistentes. Esto te asegurará que las prendas te acompañen durante todo el embarazo, incluso si se necesita lavarlas frecuentemente.
Error Nº3: No planificar después del embarazo
Muchas mujeres piensan que después del parto le dirán adiós a la ropa maternal, hasta nuevo aviso. Pero no es tan así la cosa. Desde el minuto que empiezas a recibir visitas en la clínica o en tu casa, te vas a dar cuenta lo útil que es un buen pijama o camisa de dormir con gadgets para la lactancia. E incluso estando sola, si tu guagua nace en un clima más frío, te puedo llegar a encargar tener que sacarte toda la polera para dar papa.
Lo mismo ocurre cuando te toque dar papa en situaciones menos privadas. Si convengamos, si la guagua tiene hambre hay que darle leche. Y eso puede pasar en cualquier lado. Aquí es donde una buena prenda de lactancia te viene como anillo al dedo.
+ BONUS
Si me preguntan a mi, este es el error más grave de todos:
CREER QUE LA ROPA MATERNAL SOLO LA PUEDES USAR CUANDO ESTÁS EMBARAZADA
¡Farso, farso, farso!
Quizás hace décadas atrás, cuando la ropa maternal era una especie de carpa de tela que tiraban encima de tu cuerpo. Quizás ahí si. Pero ahora con toda la variedad, modelos y estilos, no puedo permitir que hayan mujeres que no la quieran seguir usando solamente por hecho de que es "ropa maternal".
Quizás, después de 9 meses de usar la misma polera semana tras semana, quedes un poco chata y no la quieras ver en un buen tiempo. Pero eso no quiere decir que no puedas usarla más adelante. Es demasiada la cantidad de mujeres que siguen usando su ropa maternal, después del embarazo. Y es la misma cantidad de mujeres la que lo hacen y que lo cuentan casi que como un secreto.
Si te gusta tu ropa que usaste durante el embarazo, dale nomás. Sigue usándola por el tiempo que quieras 😉
Dicho todo esto, espero de corazón que no caigas en estos errores. Y si ya caíste o caes en el futuro, tranquila porque no estás sola. Cuando te digo que estos son errores comunes es por algo. Tu concéntrate en crear esa vida dentro de ti y si te quieres dar un gustito comprando, entonces que así sea. Te lo mereces.